La Vida Moderna -Lo malo de traer las orejas puestas (y los ojos y la nariz y la piel y una imaginación hiperactiva)-
-¡Estamos hechos pa'coger y no pa'entendernos! - Ah, ¿le cae? -¡Neta! Pura mamada que dicen ahora... Así le iba diciendo un señor entrado en años a un hombre/chavo de unos veintitreintaytantos que viajaba con él en el pesero. Obvio me pareció indignante y meneé la cabeza en señal de disgusto y molestia, típico del hombre (de género) el minimizar las relaciones a puro sexo. Me bajé del pesero aun con la indignación colgada de la mochila y mientras caminaba a casa la tarde, los sonidos, las nubes y el olor a lluvia futura me hicieron olvidar el asunto y desear estar en otro lado, cogiendo con alguien. ¡Vaya tarde! Sí que estaba como para entrepiernarse sin descansar, sin palabras de por medio. -No, no te la voy a comprar y ya te callas. -¡Má! ¿Por qué? Es un juegoooooooooo... -Eso crees, la ouija es cosa del diablo, llegando a la casa le preguntas a tu abuelita lo que les pasó cuando la jugaron. Seguramente hubo una epidemia de ataques diabólicos hace algunas década...